24 AL 26 DE OCTUBRE DE 2014
HOTEL SOL DE ORO | LIMA, PERÚ
VIII JORNADAS DE LA NEL
EVA-LILITH
N° 28 | 1 de Octubre de 2014
Boletín de las VIII Jornadas de la NEL

Comentario a "el no todo de Lacan" [1]
Gabriela Urriolagoitia

Miller revisa la noción del no-todo una vez más, para explicarlo esta vez, con la lógica matemática de la serie infinita, la cual se caracteriza por no tener una ley de formación en su punto de partida. Cuando en el inicio de una serie, se establece una ley de formación, la serie constituye un universo finito y puede concluirse que todos los elementos de esta serie responden a dicha ley, sin la necesidad de una verificación. En el momento en que esta ley de formación no existe, se da la imposibilidad lógica de conformar un universal, haciéndose necesario verificar los elementos de esa serie, uno por uno. Para el psicoanálisis la ley de formación que permite formar conjuntos y establecer la norma es el Nombre-del-Padre, Lacan escribe "norma macho"[2] haciendo referencia a esa ley de formación. Pero Lacan busca la otra serie, aquella donde existe lo imprevisto, y nos lleva a pensar más allá de esta ley de formación para poder abordar, con el no-todo, lo femenino.

En los Seminarios 19 y 20, efectivamente Lacan aborda lo femenino más allá del Nombre-del-Padre y del falo, sin embargo el punto de partida para llegar al no-todo, sigue siendo la función paterna: es porque ésta se inscribe a modo de excepción, que la mujer no-toda, lo es por tener un goce suplementario, pero también porque algo de su goce se articula al falo.

La propuesta de Miller en "Piezas sueltas" es que el no-todo nos permite ubicar no solo el lado femenino de la sexuación sino que la apuesta de Lacan es hacerlo extensivo al sinthome y a los analistas. Para ello hace una torsión. En lugar de tomar como punto de partida la ley de formación del Padre, nos propone partir del no-todo, de aquello que no tiene ley y es en sí mismo, un desorden. Esto implica que lo normal ya no es la norma macho, sino el "sinthome en estado puro"[3] y la pregunta sería más bien cómo hacer para pasar de esto, a esa pequeña zona comprimida que sería la neurosis. Esta propuesta de Miller permite comprender aquella otra posterior donde dice que Lacan generaliza el goce femenino hasta transformarlo en "el régimen del goce como tal"[4]

Al ubicar al no-todo como lo normal, entendemos por qué lo femenino no es sólo asunto de mujeres y nos coloca ante el reto de trabajar en una clínica orientada por lo real.

Notas:
  1. J.A. Miller, "Piezas Sueltas", Cap. X "El no-todo de Lacan", Ed. Paidós, 2013
  2. J. Lacan, Seminario Libro 19 "… o peor", Ed. Paidós, 2012, pg. 96
  3. Idem 1, pg. 189
  4. J.A. Miller, Curso "El ser y el uno", Clase del 2-3-2011

Comisión Editorial Boletín Eva-Lilith

  • Raquel Cors Ulloa
  • María Hortensia Cárdenas
  • José Fernando Velásquez

NEL - Nueva Escuela Lacaniana